Porto Alegre – RS: La sobrecarga, las fallas internas, las fallas externas, la falta de mantenimiento y el envejecimiento son algunos de los principales factores que pueden provocar estas explosiones.
Durante el funcionamiento de los transformadores, la pérdida de histéresis del núcleo de hierro, la pérdida de corrientes parásitas y la pérdida de cobre de la bobina se convierten en calor, lo que hace que la temperatura aumente.
Los transformadores no están exentos de este proceso, ya que, aunque son equipos sin partes móviles, pueden dañarse debido a variaciones de temperatura, voltaje, vibraciones y otras condiciones adversas que pueden ser perjudiciales para su funcionamiento. Este desgaste puede provocar fallos con el tiempo.
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