Los incendios producidos por fallos eléctricos son muy frecuentes en el ámbito industrial, siendo la aparición de arcos eléctricos una de las causas de incendio en algunos sectores y contextos determinados. Aunque depende la fuente consultada, los fallos eléctricos estarían detrás de al menos el 20% de los incendios producidos en el ámbito industrial.
¿Por qué son tan peligrosos? En un arco eléctrico pueden producirse temperaturas de miles de grados centígrados, capaces de fundir los elementos metálicos, normalmente de cobre o aluminio, existentes en sus proximidades.
Tras generarse el arco se produce una dilatación súbita del aire (explosión) que proyecta los metales fundidos (a modo de metralla) a distancias que pueden alcanzar varios metros, siendo éste el motivo por el que puede ser la causa del inicio de un incendio que se propague por otras zonas.
Con todo esto, los arcos eléctricos pueden poner en peligro la vida de los trabajadores y operarios que se encuentren en las inmediaciones, teniendo en cuenta lo anterior, además de altos niveles de ruido que pueden producir roturas timpánicas y la propia ionización del aire.
Gracias a ESSIIF – Escuela Superior de Seguridad Integral e Ingeniería del Fuego por compartir esta información.
