La estrategia Panameña: Construyendo la red más costo-efectiva y eficiente a nivel mundial …y por qué es importante
Antecedente:
Panamá representa una de las economías de más rápido crecimiento en América Latina y la demanda de electricidad sigue creciendo anualmente de un seis a un ocho por ciento, superando el aumento de suministro de energía. A finales del 2015, la capacidad de generación en Panamá fue de 3.235 megavatios. Esto consistió de energía hidroeléctrica de aproximadamente un 53 por ciento, energía térmica de un 37 por ciento, y energía eólica y solar de un 10 por ciento.
Entre el 2011 y 2013, la Asamblea Nacional de Panamá promulgó tres leyes que establecen incentivos fiscales y otros para instalaciones de generación de energía eólica, solar, y de gas natural, ya que no existirá una nueva inversión en cisternas de producción de energía hidroeléctrica (con una excepción final), debido a preocupaciones ambientales, las condiciones de sequía periódicas y otros factores con relación al suministro.
Mientras continúan las inversiones en el sector privado respecto a los proyectos de generación de energía solar y eólica, el aumento en suministro de energía eléctrica se ha visto considerablemente restringido por limitaciones de capacidad en líneas de transmisión. Las líneas existentes no permiten la transferencia de la energía generada en la parte occidental del país, cerca de la frontera con Costa Rica, a la parte oriental del país, donde se encuentra la ciudad de Panamá.
Como miembro del Mercado Regional Eléctrico Centroamericano (MER), que entró en funcionamiento en 2013 para ayudar a los países Centroamericanos que intercambian energía en un esfuerzo por reducir los costos al consumidor y mejorar la confiabilidad, se espera que la capacidad de Panamá en líneas de transmisión llegará a ser aún más restringido si no se trata este tema más pronto. También se estima que la demanda de electricidad se duplicará en la región en los próximos 15 años.
Estrategia:
Actualmente, los servicios de transmisión en Panamá (115 kV y con voltajes mayores) son proporcionados exclusivamente por la empresa estatal, Empresa de Transmisión Eléctrica, S.A. (ETESA) que se fundó en 1998. Debido a la magnitud del desafío, limitaciones en financiamiento, y preocupaciones acerca del aumento en los costos al consumidor, el Jefe Ejecutivo de ETESA, Iván Barría, desarrollaro un plan estratégico que se enfoca en la eficacia de la línea de transmisión y no solamente en la capacidad.
La ley 6 de 1998 dicta que ETESA recibirá un 13,7% en retornos de nuevos activos y pueden mantener cualquier ganancia en cuanto a las pérdidas del sistema que caen por debajo de un 4 por ciento. La renta añadida permite que ETESA busque financiamiento internacional de garantías para acelerar – y pagar – las mejoras que se encuentran en la red de energía eléctrica de Panamá sin tener que sobrecargar a los consumidores.
Mediante la aplicación de máxima eficiencia, ETESA es capaz de mostrar ingresos reales e ingresos previstos lo cual son suficientes para cubrir los costos de inversión y proporcionar retornos favorables a los titulares (de las garantías). A partir de agosto de 2016, ETESA ha asegurado $200 millones con la Corporación Andina de Fomento (CAF) y la ayuda del Banco de nueva Escocia. Además, ETESA está trabajando activamente en los Estados Unidos y en los mercados de garantías europeas para garantizar la financiación adicional.
De acuerdo con el Jefe Ejecutivo de ETESA, Iván Barría, mejoras en la eficiencia, capacidad, confiabilidad y resistencia no sólo reducirá los costos al consumidor, si no también le permitirá a ETESA entregar más energía a su clientela. Esto se reflejará en costos menores en las facturas de las cuentas de energía eléctrica, y también ayudará a sociedad y a la economía crecer y volverse más productive.
Mientras que tecnologías más eficientes como el Conductor ACCC de alta capacidad y alta eficiencia, se está utilizando por ETESA para reemplazar los cables AAAC, ACSR y ACSS existentes, se ha notado una reducción en pérdida de líneas de un 30% o más. Esto rápidamente ha recompensado el costo mayor inicial del conductor de alto rendimiento. El uso de nuevos conductores de alto rendimiento también permite que ETESA utilice las estructuras existentes sin modificaciones, lo cual sirve para reducir los costos generales del proyecto y plazos de construcción.
Para reducir los costos de capital aún más, ETESA generalmente ordena productos en lote a través de contratos multianuales y utiliza licitaciones para asegurar que se reciban propuestas competitivas.
Aprovechando un financiación a muy bajo costo a través de bancos como EXIM, el Banco Mundial y otros bancos de exportación en Japón, Corea y otros países, esto permite que ETESA establezca condiciones de pago de un año con sus proveedores para que no tengan que realmente pagar los productos hasta que los productos están en servicio y estén generando ingresos. Estos mecanismos de financiamiento también aseguran que se les page a los proveedores de ETESA al enviar los productos dentro de un plazo de un año.
Mientras que algunos proveedores de energía eléctrica compran los productos menos caros al inicio de proyecto, ellos no consideran el costo de ciclo de vida. La estrategia de ETESA dicta que ellos solamente compran los productos y la tecnología disponible más eficiente lo cual resulta en un costo menor durante la vida útil del proyecto y que además proporciona grandes ahorros a los consumidores.
Resumen:
Aunque la estrategia de ETESA de “construir la red más costo-efectiva y eficiente a nivel mundial” puede parecer un poco optimista, esto puede llegar a ser el mejor camino a seguir para muchas empresas de utilidades, legisladores, reguladores, operadores en la red, y en muchas otras partes del mundo, especialmente si se consideran todos los beneficios sociales.
Fuente: ctcglobal.com
